Un nuevo trabajo de investigación desarrollado por expertos de la Universidad de Auckland (Nueva Zelanda) y la Universidad de Waterloo (Canadá), pone de manifiesto la importancia de regular los niveles de glucosa en sangre durante la infancia.
En concreto, sugieren que estabilizar los niveles bajos de glucosa en sangre durante la infancia previene la aparición de daño cerebral a largo plazo en otros periodos de la vida.
Cuando los niveles de glucosa en sangre son demasiado bajos se denomina hipoglucemia. Y es que tan perjudicial es esta situación como contar con unos valores elevados en el organismo. El cuerpo requiere de una cantidad suficiente de glucosa, por lo que es necesario contar con unos niveles óptimos.
Niveles de glucosa bajos en la infancia
Los investigadores responsables de este interesante estudio comentan que los niveles de glucosa bajos es común y afecta a uno de cada seis bebés. Se trata de una situación de salud que es conveniente paliar para prevenir complicaciones futuras.
Debemos tener en cuenta que la glucosa es la principal fuente de combustible para el cerebro y el cuerpo. Así, estos investigadores señalan que una hipoglucemia no tratada puede ocasionar efectos adversos en el desarrollo neurológico del menor hasta la edad de 4 o 5 años.
Actualmente, se conoce que la exposición a niveles bajos de glucosa en sangre puede alterar la forma del curso de desarrollo temprano. Sin embargo, en investigaciones previas ha habido una brecha de comprensión en como la hipoglucemia puede afectar después de superar la etapa de la primera infancia.
Al respecto, esta nueva investigación analizó las consecuencias que puede tener a largo plazo en el desarrollo del cerebro contar con niveles bajos de glucosa cuándo se trata de recién nacidos. En concreto, este examen se realizó en niños de entre 9 y 10 años.
Así, los expertos observaron que no existía una diferencia considerable en los resultados académicos de niños con hipoglucemia cuando eran recién nacidos; en comparación con otros compañeros que presentaron niveles de glucosa normales en las primeras etapas tras su nacimiento.
Por tanto, los expertos determinan que seguir un tratamiento adecuado después del nacimiento para estabilizar los niveles bajos de glucosa en sangre ayuda a prevenir el desarrollo de cualquier complicación cerebral a largo plazo en el menor.
Como conclusión, los investigadores exponen que «es un gran alivio saber que los bebés que nacen y reciben tratamiento por una afección tan común como la hipoglucemia probablemente no sufran daño cerebral a largo plazo».
Hipoglucemia en bebés
Nacer con niveles bajos de glucosa en sangre no es habitual, aunque tal y como resaltan los investigadores de este estudio ocurre en uno de cada seis bebés. Si bien, esta hipoglucemia neonatal ocurre principalmente en bebés que cuentan con los siguientes factores de riesgo:
- Bebés que nacen de forma prematura y presentan una infección grave tras el paro.
- Madres con diabetes.
- Bebés que crecen en el útero de manera más lenta de lo que se espera.
- Bebés que son más grandes o más pequeños de lo normal en función de su edad gestacional.
Los profesionales de ‘MedlinePlus‘ destacan que el tratamiento para corregir esta hipoglucemia neonatal se basa en «recibir alimentaciones extras con leche materna o fórmula. Los bebés amamantados posiblemente necesiten recibir fórmula extra si la madre no puede producir suficiente leche. (La presión con la mano y un masaje pueden ayudar a las madres a exprimir más leche). En ocasiones se puede proporcionar temporalmente azúcar en gel por vía oral, si no hay suficiente leche».