Un nuevo trabajo de investigación determina que las personas que han sufrido una lesión cerebral leve pueden tener un mayor riesgo de deterioro cognitivo y desarrollar problemas de memoria al cabo de un año, en comparación con personas que no han tenido este tipo de lesiones.
Este nuevo estudio se ha publicado en la revista online ‘Neurology‘, que es la revista médica de la Academia Americana de Neurología. Además, los resultados de la investigación muestran que las personas con malos valores cognitivos, eran más propensas a tener síntomas de ansiedad y menor satisfacción con la vida.
Raquel Gardner, principal investigadora del estudio y perteneciente a la Universidad de California en San Francisco (Estados Unidos), explica que «nuestros resultados sugieren que los malos resultados cognitivos clínicamente significativos, que definimos como deterioro cognitivo, declive cognitivo o ambos, un año después de una conmoción cerebral pueden ser más comunes de lo que se pensaba.
Es decir, este estudio sugiere que una conmoción cerebral leve, a priori sin efectos dañinos, puede generar deterioro cognitivo o problemas de memoria a largo plazo.
Conmoción cerebral leve y problemas de memoria
En esta misma línea, la autora Raquel Gardner, señala que los resultados «también destacan la necesidad de comprender mejor los mecanismos que subyacen a los malos resultados cognitivos, incluso después de lesiones cerebrales relativamente leves, para mejorar la terapia de recuperación».
Concretamente, este trabajo de investigación analizó a un total de 656 personas que habían ingresado en salas de urgencias de centros de traumatismo con conmociones cerebrales; además de a 156 personas sanas que no presentaban lesiones en la cabeza. La edad media de todos los individuos es de 40 años.
Para observar posibles afectaciones en la memoria o deterioro cognitivo, a los participantes se les sometió a pruebas neurológicas después de la lesión, a las dos semanas, a los seis meses y finalmente al cabo de un año.
Así, cada una de las evaluaciones realizadas por los investigadores aportó cinco puntuaciones de tres pruebas de memoria, habilidades lingüísticas y otros dominios cognitivos.
Con todo ello, el resultado deficiente cognitivo se definió como el cumplimiento de los criterios de deterioro cognitivo; declive cognitivo o ambos. Por su parte, el deterioro cognitivo se estableció como un rendimiento inferior al esperado en al menos dos de las pruebas evaluadas, como una prueba de memoria y otra relativa a la velocidad de procesamiento.
Resultados de la investigación
Los responsables de la investigación aclaran que los resultados no prueban que las conmociones cerebrales leves ofrezcan peores efectos cognitivos o en la memoria al cabo de un año. Sin embargo, muestran una asociación.
La especialista Gardner detalla que «estudios anteriores sobre personas con lesiones cerebrales de moderadas a graves muestran que una rehabilitación temprana e intensiva puede mejorar los resultados cognitivos de las personas a lo largo del tiempo».
Seguidamente argumenta que «se necesita más investigación para averiguar el papel de la rehabilitación cognitiva en personas con lesiones cerebrales más leves que también corren el riesgo de tener malos resultados cognitivos, y cómo predecir quiénes entran en esta categoría de riesgo».
Respecto a la investigación, los autores observaron que 86 de las 656 personas con lesiones cerebrales mostraban malos resultados cognitivos al cabo de un año. De ellos, únicamente un 10% mostraba deterioro cognitivo o problemas de memoria.
Estos resultados se comparan con las 156 personas sin lesiones cerebrales leves, de las cuales solo un 5% ofrecían un deterioro cognitivo al cabo de un año.