La vitamina D es una de las más necesarias para mantener el correcto funcionamiento del organismo. Por esta razón, debemos estar alerta ante cualquier cambio que suceda en nuestro cuerpo que nos avise de la falta de este nutriente en el organismo.
El déficit de vitamina D es el resultado de que los niveles de esta en nuestro cuerpo no son los correctos que debemos tener a diario para mantener una buena salud.
En este sentido, lo primero que tenemos que tener en cuenta es que los niveles correctos de vitamina D en el organismo van a depender sobre todo de la edad. Es decir, cuando vamos cumpliendo años nuestro cuerpo va a necesitar una mayor cantidad de este nutriente.
Y es que la vitamina D se encuentra en todas las células de nuestro cuerpo, de ahí la importancia de consumir alimentos que sean ricos en este nutriente. O incluso podemos ingerir suplementos que tengan como compuesto principal esta vitamina.
Cabe destacar que ingerir las cantidades adecuadas es clave para la absorción del calcio. Y, por tanto, fundamental en la salud de los huesos.
Motivos por los que disminuyen los niveles de vitamina D
Algunas de las consecuencias directas en nuestro cuerpo de sufrir un déficit de vitamina D es cansancio, malestar corporal, dolor muscular, sensación de fatiga, insomnio o un bajo estado de ánimo.
Motivos por los que podemos sufrir falta de vitamina DSin embargo, estos síntomas no siempre llegan a aparecer cuando se tiene una falta de esta vitamina en el organismo. Sino que lo más común es que comencemos a sentirlos cuando pasamos mucho tiempo con este déficit.
En cuando a los motivos por los cuáles puede aparecer un déficit de esta vitamina, la mayoría de ellos están relacionados con una falta de exposición solar.
Y es que esta vitamina se sintetiza a través de la piel, por lo que los rayos del sol son un tratamiento natural ideal para evitar la falta de este nutriente. Algo que realmente puede suponer muy sencillo de prevenir, pero que en algunas ocasiones aparece inesperadamente.
Además de esto, puede ser que estemos siguiendo sin darnos cuenta una dieta pobre en alimentos ricos en vitamina D. Por lo que no estamos recuperando los niveles normales que deben permanecer en el organismo.
A la hora de calcular la dosis de vitamina D que necesita un organismo al día, es necesario tener en cuenta dos factores principalmente: masa corporal y cantidad de luz solar que llega a la piel.
Alimentos que nos aportan las cantidades correctas de vitamina D
Como hemos mencionado anteriormente, consumir alimentos ricos en vitamina D es esencial para mantener una buena salud. Sobre todo si hablamos de la salud de la piel, una de las partes de nuestro cuerpo que más sufre si tenemos déficit de este nutriente.
El huevo es uno de los alimentos que más cantidad de vitamina D va a aportarnos. Pero, además, también podemos aumentar el consumo de algunos de los siguientes productos:
- Aceite de hígado de bacalao.
- Salmón.
- Anguila.
- Angula.
- Atún fresco.
- Caballa.
De hecho, los pescados son una de las mejores fuentes de vitamina D para el organismo. Aunque los expertos afirman que si seguimos una dieta sana y equilibrada no tendremos problemas a la hora de cuidar nuestra salud.