Llevar una vida saludable es fundamental en cualquier etapa de nuestra vida. Sin embargo, a medida que envejecemos se hace más necesario seguir una serie de hábitos que ayuden a sentirnos mejor y reducir el riesgo de desarrollar diferentes patologías.
En este sentido, es necesario destacar que la Organización Mundial de la Salud (OMS) define la salud como «un estado de completo bienestar físico, mental y social».
Así, para gozar de una buena salud se requiere de una serie de hábitos saludables que ayudan al bienestar del ser humano y el correcto funcionamiento del organismo. Por todo ello, los expertos recomiendan potenciar estos hábitos saludables a partir de los 30 años.
Hábitos saludables a partir de los 30 años
El primer hábito saludable que es necesario seguir con mayor importancia a partir de los 30 años es una dieta equilibrada y completa.
Al respecto, los profesionales de ‘Sanitas’ indican que «una alimentación saludable se rige por incluir todos los alimentos contemplados en la pirámide nutricional, pero en las proporciones adecuadas y en la cantidad suficiente (no más) para mantener las necesidades nutricionales del organismo en función del consumo energético que éste realiza con la actividad diaria».
Además, también es importante evitar hábitos tóxicos para el organismo. Por ejemplo, el consumo de alcohol, tabaco y otras drogas tienen una influencia especialmente negativa en la salud.
En nuestros hábitos saludables a partir de los 30 años no puede faltar el ejercicio físico de forma regular. Los expertos recomiendan realizar al menos 30 minutos diarios de actividad física, aunque sea caminar a paso rápido.
La actividad física es esencial para «quemar las calorías sobrantes y fortalecer músculos y huesos, pero también ayuda a controlar la tensión arterial, el colesterol y los niveles de glucosa en sangre, además de contribuir a la eliminación del estrés y ayudar a dormir mejor, adquirir un estado de relajación y evitar cambios de humor, mejorar la autoestima y el estado de satisfacción personal».
En este sentido, una higiene adecuada también constituye un hábito saludable esencial. Se trata de una actividad que ayuda a prevenir diferentes problemas de salud, como infecciones, daños en la piel o dificultades relacionadas con la salud de los dientes.
Otros elementos claves
Es importante para la salud evitar productos tóxicos que pueden causar diversos daños en el organismo. En este sentido, la contaminación ambiental de las ciudades estás considerada como un factor de riesgo fundamental en la salud.
Otro hábito saludable crucial se encuentra en el equilibrio mental. Concretamente, nos referimos al estado de bienestar emocional y psicológico, ya que esto es fundamental para la salud en general. El estrés, depresión, ansiedad o irascibilidad son factores que indican que la persona no se encuentra saludable en cuanto a su estado mental.
Como conclusión, los profesionales de ‘Sanitas‘ aportan que «las relaciones sociales son un aspecto fundamental para la salud del ser humano y, en consecuencia, para un envejecimiento saludable. El aislamiento social puede llevar a un deterioro gradual e irreversible de las capacidades físicas y mentales, incluso a la incapacidad física y la demencia».