Controlar los niveles de glucosa en sangre es fundamental para detectar una posible prediabetes y reducir el riesgo de que derive en el desarrollo de diabetes. Además, las personas con diabetes deben medir de forma regular sus niveles de glucemia para evitar posibles complicaciones por hiperglucemia o hipoglucemia.
Con todo ello, no hay que olvidar que la glucosa es un elemento nutritivo de gran importancia para el organismo, siempre que se mantenga en niveles considerados saludables.
Los expertos médicos recomiendan que los adultos mayores de 45 años se hagan análisis de sangre periódicos para detectar un posible riesgo de diabetes. Asimismo, si tiene sobrepeso o tiene algún tipo de factor de riesgo de prediabetes, es recomendable que se realice estas pruebas regularmente hasta los 45 años.
Por tanto, las personas en general deben realizar revisiones periódicas, especialmente a partir de los 45 años sobre sus niveles de glucosa, para observar que todo está correcto.
Análisis de glucosa en sangre en ayunas
Uno de los momentos del día más indicados para analizar los niveles de glucosa en sangre es en ayunas durante la mañana. Así, estos son los diferentes niveles de glucosa en sangre que podemos obtener:
- Un nivel de glucosa en sangre en ayunas por debajo de 100 miligramos por decilitro (mg/dl) es considerado normal. En este caso no debemos preocuparnos.
- Un nivel de glucosa en sangre entre 100 mg/dl y 125 mg/dl se considera prediabetes. En este tipo de situaciones un especialista médico diagnostica que la glucosa está alterada y es necesario establecer un tratamiento para prevenir el desarrollo de diabetes.
- Por último, un nivel de glucosa en sangre en ayunas por encima de 126 mg/dl indica diabetes tipo 2.
Igualmente, las personas con diabetes deben llevar a cabo una serie de hábitos de forma regular en su vida diaria para controlar los niveles de glucosa en sangre. La alimentación saludable y la realización de ejercicio físico es clave en este aspecto.
En este sentido, tanto los episodios de hiperglucemia (glucemia elevada) como hipoglucemia (glucemia baja) puede ser perjudicial para la salud.
En resumen, las personas sanas u obesas mayores de 45 años deben hacerse análisis de sangre u orina para ver si los niveles de azúcar en la sangre están dentro del rango normal. Se recomienda obtener este tipo de muestras de sangre y orina en ayunas.
En el caso de los diabéticos, deben medirse el azúcar en sangre todas las mañanas con un medidor de glucosa antes del desayuno para controlar adecuadamente la enfermedad. Hay muchos medidores de glucosa en sangre que permiten hacer esto en casa.
¿Qué es la hiperglucemia?
La subida elevada de los niveles de glucosa en sangre se define como hiperglucemia. Cuando esto ocurre, aumenta de forma considerable el riesgo de enfermedad cardiovascular, por lo que es importante seguir hábitos de vida que ayuden a su prevención; así como poner una solución lo más rápido posible.
En cualquier caso, nunca hay que perder la calma ante un episodio de hiperglucemia, para actuar de la mejor forma posible y establecer un tratamiento oportuno indicado previamente por un especialista en la materia.
Así, existen diferentes factores que puede interferir en el desarrollo de hiperglucemia, como la vida sedentaria. la aparición de una enfermedad que incremente las necesidades de insulina, el aumento de la ingesta de carbohidratos en la dieta o la falta de inyección de insulina.
Los principales síntomas que pueden advertir al paciente sobre una posible subida de los niveles de glucosa en sangre son algunos de los siguientes:
- Aumento del apetito.
- Pérdida de peso repentina.
- Subida de la cantidad de orina habitual.
- Incremento de la sed.
Hay que tener en cuenta que la hiperglucemia es una afección de salud que ocurre especialmente en las personas con diabetes, ya que este tipo de pacientes presentan dificultades a la hora de generar la insulina suficiente o utilizarla de forma adecuada por parte del organismo.
¿En qué consiste la hipoglucemia?
En el lado opuesto es necesario hablar de la hipoglucemia, que es una afección de salud que surge cuando los niveles de glucemia descienden hasta niveles demasiado bajos. Así, en este caso, las consecuencias para la salud también pueden ser significativos.
Por tanto, lo ideal es contar con unos niveles normales de glucosa en sangre y seguir unos hábitos de vida que permitan evitar cualquier episodio de hipoglucemia o hiperglucemia.
En este sentido, la hipoglucemia se manifiesta a través de diferente síntomas, como temblores, sudores, fatiga, irritabilidad, ansiedad, palpitaciones acelerada e irregulares del corazón y hormigueo o entumecimiento de lengua, mejilla y labios.
Si sientes una sintomatología correspondiente a la hipoglucemia es recomendable acudir a un especialista médico de inmediato para que establezca un tratamiento de choque que permita reestablecer los niveles de glucosa en sangre cuanto antes.
En el caso de las personas con diabetes, es recomendable que las personas del entorno (familiar, escolar, laboral…etc.) sepan como actuar ante un posible caso de hipoglucemia.