Mantener los niveles de triglicéridos y colesterol en un rango adecuado, ayuda a reducir el riesgo de numerosas enfermedades, especialmente las patologías cardiovasculares o cerebrovasculares. En este sentido, la alimentación juega un papel clave.
Los triglicéridos son un tipo de grasa que se encuentra en el cuerpo humano. Concretamente, es el principal tipo de grasa que se encuentra en la sangre, siendo necesario evitar que se acumule en grandes cantidades.
Cuando los niveles de triglicéridos se encuentran más altos de lo normal, se denomina hipertrigliceridemia. Los profesionales de la Fundación del Corazón (FEC) recomiendan mantener los niveles de esta grasa por debajo de 150 mg/dl. Los niveles elevados de triglicéridos se relacionan con un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares y también con pancreatitis.
Alimentos prohibidos en caso de triglicéridos altos
Hay que tener en cuenta que este tipo de grasa procede generalmente de los alimentos, como la mantequilla, aceites u otros alimentos de alto contenido graso. Además, los niveles de triglicéridos también se incrementan por las calorías adicionales; es decir, esas calorías que introducimos al organismo, pero que realmente el cuerpo no necesita de inmediato.
Por lo general, presentar hipertrigliceridemia no provoca síntomas en la persona. Por ello, la única forma de diagnostica con exactitud niveles altos de triglicéridos en sangre es a través de un análisis médico de sangre exhaustivo.
Así, para mantener unos valores de triglicéridos normales, es fundamental seguir un estilo de vida saludable, cimentado en una alimentación sana y baja en grasas. Además, se debe complementar con una vida activa, con la realización de ejercicio físico con regularidad.
En caso de contar con niveles altos de triglicéridos es recomendable evitar el consumo de alimentos que aporten grasas saturadas, como por ejemplo la mantequilla, aceite, carnes rojas grasas, productos lácteos enteros, aceite de coco, aceite de palma, productos de repostería y bollería industrial.
Igualmente, los expertos también señalan que es importante evitar los azúcares simples, la fructosa y especialmente el alcohol, ya que todos ellos incrementan la síntesis hepática de triglicéridos. Pequeñas cantidades de alcohol pueden elevar de forma considerable los niveles de triglicéridos.
Alimentos recomendados
Si contamos con niveles altos de triglicéridos es necesario establecer una alimentación adecuada que permita restablecer los valores. En este sentido, es conveniente evitar el consumo de todos los alimentos que aportan grasas saturadas, como los mencionados anteriormente.
En contrapartida, es recomendable acudir a alimentos ricos en ácidos grasos monoinsaturados, como el aceite de oliva o aquellos que cuenten con importantes cantidades de ácidos grasos omega -3, como los pescados azules.
Desde la Fundación Española del Corazón (FEC) recomiendan seguir una dieta mediterránea, rica en frutas y verduras que aportan minerales y vitaminas esenciales para el correcto funcionamiento del organismo. Además, es aconsejable optar por carnes magras, aves sin piel, productos lácteos desnatados y retirar la grasa visible de los alimentos cárnicos.
Por otra parte, junto a una buena cantidad de frutas y verduras, también es recomendable consumir de forma habitual legumbres. Son un alimento que proporciona una buena cantidad de proteínas de origen vegetal, saludable e ideal para reducir los niveles de triglicéridos.