Un nuevo trabajo de investigación sugiere que las estatinas, medicamentos utilizados habitualmente para reducir los niveles de colesterol y triglicéridos en sangre, podría frenar la metástasis por cáncer. Dicho estudio se ha publicado en la prestigiosa revista ‘Clinical and Translational Medicine‘.
Al parecer, este tipo de fármacos contarían con un gen que favorece que la reducción de la metástasis de las células cancerosas. Cuando se produce metástasis de un cáncer localizado en el organismo, las probabilidades de muerte aumentan de forma considerable.
En este sentido, la comprensión de los mecanismos moleculares de la metástasis es una pieza clave en la lucha contra el cáncer. Ahora, un grupo de investigadores ha encontrado una cierta relación entre las estatinas para reducir el colesterol y frenar la metástasis.
Cabe destacar que este mismo grupo de investigadores descubrió hace más de diez años un importante motor del proceso de metástasis en el cáncer colorrectal humano. Concretamente, el gen asociado a la metástasis en el cáncer de colon MACC1.
Estatinas para reducir el colesterol y riesgo de metástasis
Los expertos del Laboratorio Europeo de Biología Molecular (EMBL) de Heidelberg (Alemania), explican que cuando las células cancerosas expresan MACC1, incrementa su capacidad para proliferar, desplazarse por el cuerpo e invadir otros tejidos.
Al respecto, uno de los principales autores de la investigación, Ulrike Stein, detalla que «muchos tipos de cáncer se propagan sólo en pacientes con alta expresión de MACC1».
Cabe destacar que el papel del MCC1 como elemento clave y biomarcador del crecimiento tumoral y metástasis ha sido analizado desde entonces por numerosos investigadores en todo el mundo y confirmado como tal en más de 300 publicaciones.
Ahora, este mismo grupo de investigadores del EMBL han descubierto que las estatinas indicadas para reducir el colesterol inhiben la expresión de MACC1 en las células tumorales. Es decir, podrían ayudar a frenar la metástasis del cáncer.
Resultados de la investigación
El objetivo principal de los investigadores era encontrar inhibidores de MACC 1. Así, los investigadores llevaron a cabo un cribado de fármacos de alto rendimiento, dando de forma independiente con las estatinas.
Seguidamente, probaron las estatinas para reducir el colesterol en varias líneas celulares tumorales, obteniendo resultados favorables. Los siete fármacos probados disminuyeron la expresión de MACC1 en las células tumorales, aunque en diferentes grados.
Dado los increíbles resultados, los investigadores procedieron a administrar los inhibidores de colesterol a ratones modificados genéticamente que contaban con una mayor expresión de MACC 1. Así, observaron como estos medicamentos suprimieron casi por completo la formación de tumores y metástasis.
El científico Stein argumenta respecto a ello que «lo que es particularmente notable es que los beneficios continuaron en los animales incluso después de que redujéramos la dosis en relación con la cantidad que los humanos normalmente ingieren».
Además de probar el medicamento con animales, los científicos también analizaron los datos de un total de 300.000 pacientes a los que se les recetó estatinas para reducir el colesterol. Así, este examen también descubrió una relación palpable.
Según los investigadores, «los pacientes que tomaban estatinas tenían sólo la mitad de incidencia de cáncer en comparación con la población general».
«Todavía estamos en los inicios. Las líneas celulares y los ratones no son seres humanos, por lo que no podemos trasladar directamente los resultados», concluye el principal autor de la investigación, Ulrike Stein.