El ácido úrico es una sustancia que se genera en el propio organismo por el proceso de descomposición de purinas. Sin embargo, el consumo de alimentos y bebidas ricas en purinas también puede provocar un aumento de los niveles de este ácido.
Así, algunas personas tienen una mayor tendencia al aumento rápido de los niveles de ácido úrico y al desarrollo de una enfermedad conocida como gota. En este caso, se hace más necesario aún establecer un control sobre la alimentación.
La principal consecuencia del ácido úrico elevado (hiperuricemia) es el desarrollo de gota, una patología que surge por la acumulación de cristales de purinas en las articulaciones y el dedo gordo del pie. Se caracteriza por generar síntomas de inflamación y dolor intenso.
Además, según indican diferentes expertos, el ácido úrico elevado constituye un factor de riesgo cardiovascular por sí solo. Además, la gota también incrementa el riesgo de diabetes e ictus.
Este riesgo para la salud se debe a múltiples factores vinculados al efecto directo de los niveles elevados de ácido úrico, la inflamación que generan los cristales formados en las articulaciones o la toma frecuente de antiinflamatorio para los ataques.
Cómo reducir el ácido úrico
La única forma de detectar de forma segura la hiperuricemia es a través de un análisis de sangre. Así, si dicho análisis muestra niveles altos de ácido úrico, es necesario establecer un tratamiento cuanto antes que permite restablecer los valores en un rango normal.
Primeramente, el tratamiento consistirá en seguir una dieta determinada, donde no haya o apenas haya presencia de alimentos ricos en purinas. En este sentido, es apropiado optar por una dieta saludable, que presumiblemente recetará su médico.
Así, es importante eliminar de la alimentación el marisco, bebidas alcohólicas, carne de cerdo, cubitos de caldo, sardinas, vísceras, coliflor o espárragos; ya que todos estos alimentos provocan una subida del ácido úrico en sangre.
Hay que tener en cuenta que el alcohol incrementa el lactato en el corriente sanguíneo, lo que deriva en inhibir la eliminación de ácido úrico. Numerosos expertos apuntan a la cerveza como una bebida alcohólica no recomendada en caso de hiperuricemia. También es aconsejable evitar las bebidas con alcohol de mayor graduación.
Hábitos saludables
En cuanto a los hábitos saludables a seguir para reducir los niveles de ácido úrico en caso de hiperuricemia y/o gota es recomendable beber mucha cantidad de agua; al menos 2 litros al día. Beber agua en grandes cantidades permitirá eliminar el exceso de ácido úrico a través de la orina con mayor rapidez.
También es adecuado realizar ejercicio físico de intensidad moderada. Esta actividad física debe ajustarse a la condición de cada paciente, sin forzar al cuerpo en situaciones de dolor. En caso de que exista sobrepeso, adelgazar de forma progresiva es beneficioso para reducir el ácido úrico.
Volviendo a la alimentación, es importante que la estructura nutricional en caso de hiperuricemia se base en una alimentación saludable; con presencia de frutas y verduras, legumbres, huevos y productos lácteos.