Las fresas son una de las frutas más consumidas en todo el mundo, y también en España. Se trata de un alimento que genera importantes beneficios en la salud, gracias a su composición nutricional. Así, entre otras cosas, está indicada para reducir los niveles de colesterol y triglicéridos en sangre.
Los expertos destacan algunos de los beneficios más importantes del consumo habitual de fresas, como fortalecer la salud de los huesos, prevenir la obesidad, combatir la aparición de artritis, es ideal para personas con diabetes y reducir la tensión arterial; así como otros problemas cardiovasculares.
El colesterol es una sustancia que combina grasas y proteínas. Si bien, en medicina se distingue el colesterol bueno (HDL) y colesterol malo (LDL). El HDL transporta colesterol de otras partes del cuerpo al hígado y luego es eliminado por este órgano.
Sin embargo, el denominado colesterol LDL o ‘malo’ provoca una acumulación de placa en las arterias. A veces puede provocar el taponamiento de la circulación sanguínea y derivar en problemas cardiovasculares de considerable gravedad para la salud. En casos graves puede causar la muerte.
Consumir fresas para reducir el colesterol malo
Un estudio realizado en la Universidad Politécnica delle Marche (Italia), en colaboración con las universidades de Salamanca, Granada y Sevilla constataron la capacidad beneficiosa del consumo de fresas para la salud. En concreto, la ingesta de este alimento reduce los niveles de colesterol malo y triglicéridos.
Este trabajo de investigación se basó en un experimento por el que proporcionaron 500 gramos de fresas a la dieta diaria de 23 participantes sanos durante un periodo de un mes. A todos ellos se les realizaron muestras de sangre antes y después del estudio, para poder comprobar los resultados.
Tras un mes consumiendo medio kilo de fresas de forma diaria, los triglicéridos disminuyeron un 20%. Igualmente, el colesterol malo se redujo en un 8,7%. Así, los investigadores pudieron comprobar un gran efecto del consumo de fresas para estas dos afecciones habituales en la salud.
Si bien, la ingesta de fresas también se vio reflejada en la mejora de otros parámetros, como la capacidad de lípidos en el plasma, capacidad de absorción de radicales de oxígeno o vitamina C; mejora de las defensas antihemolíticas y la función plaquetaria.
No obstante, los expertos señalan que todos los parámetros regresaron a sus valores iniciales a los 15 días de abandonar el tratamiento de consumir 500 gramos de fresas cada día, por lo que demuestra que los efectos los provocó la ingesta de esta fruta.
Este mismo equipo de investigación también determinó a raíz de otros ensayos clínicos que el consumo de fresas también ayuda a proteger a la piel de la radicación ultravioleta. Por otra parte, también disminuye el daño que causa el consumo de alcohol en la mucosa gástrica, fortalece los eritrocitos e impulsa la capacidad antioxidante de la sangre.
Niveles de triglicéridos
Mantener los niveles de triglicéridos adecuados en la sangre es fundamental para la salud. Primeramente, porque valores elevados de triglicéridos pueden causas pancreatitis aguda; la cual provoca inflamación en el páncreas y supone un riesgo elevado de muerte.
Por otra parte, los triglicéridos son un factor independiente de riesgo cardiovascular, si bien en una magnitud inferior a la que produce el colesterol. Sin embargo, los triglicéridos constituyen un riesgo lipídico residual o remanente, que es la probabilidad de sufrir una enfermedad cardiovascular, a pesar de contar con un nivel aparentemente normal de colesterol.
Por todo ello, las fresas son alimento muy recomendable para llevar una vida saludable. Y es que su consumo es beneficioso para reducir los niveles de colesterol y triglicéridos en el organismo.