El ácido docosahexaenoico o DHA, es un tipo de ácido graso omega-3 que se encuentra en todo el organismo, pero que se caracteriza sobre todo porque es esencial para el correcto funcionamiento del cerebro.
El DHA es un compuesto que contribuye con el desarrollo de las funciones de las neuronas en los niños, así como mantiene el buen funcionamiento del cerebro en los adultos y le ofrece muchos beneficios al sistema cardiovascular, es por esta razón que los especialistas en salud siempre recomiendan consumir una buena cantidad de este nutriente a lo largo de la vida.
Ahora bien, aunque es cierto que en la actualidad existen muchos suplementos que pueden aportar este tipo de ácido graso, lo mejor siempre será obtenerlo de forma natural mediante la alimentación, a menos que un especialista recete el consumo de dichos suplementos, por esta razón es que es fundamental conocer cuáles son los alimentos ricos en DHA, para así poder incluirlos en la dieta.
Alimentos ricos en DHA
Estos son los principales alimentos que ayudan a obtener cantidades importantes de ácido docosahexaenoico o DHA.
Algas
Las algas se caracterizan por contener una gran cantidad de vías bioquímicas diferentes a las que tienen las plantas y los animales, por eso es que su consumo siempre es recomendado para contribuir con la salud integral del cuerpo.
Huevos
En la yema de los huevos se pueden encontrar pequeñas dosis de HDA, otra razón más para incluir este maravilloso alimento a la dieta habitual.
Almendras
Dentro de las propiedades de las almendras se encuentra también una buena cantidad de DHA, siendo esta una de las razones por las que los médicos y nutricionistas recomiendan incluirlas en la dieta.
Pescados grasos
Dentro de los llamados pescados grasos se encuentra el salmón, las anchoas, el arenque, el atún, la caballa y el fletán.
Aunque la mejor alternativa es el salmón, pues en este pescado se encuentran alrededor de 5.175 miligramos de DHA, por eso los especialistas sugieren incluir unos 200 gramos de salmón en la dieta semanal.
Vale la pena acotar que no existen muchos alimentos que aporten DHA, por lo tanto, se recomienda también el consumo de alimentos fortificados con dicho nutriente.
Beneficios de comer alimentos que aporten HDA
Como ya se mencionó al principio de este artículo, el DHA ayuda a garantizar un adecuado desarrollo neuronal durante la etapa infantil o incluso durante la gestación, por eso también se recomienda su consumo durante el embarazo.
Por otro lado, es un nutriente que le aporta mucho al funcionamiento del sistema inmunológico, ayudando a fortalecer las defensas del cuerpo, además de que es beneficioso para el sistema cardiovascular, debido a que funciona como un vasodilatador arterial, ayuda a controlar la presión arterial, previene la acumulación del LDL o colesterol malo y es clave para el buen funcionamiento del corazón.
El DHA representa el 97% del omega-3 que se encuentra en el cerebro, mientras que para el ojo, representa el 93% del omega-3 que se localiza en la retina.
Según expertos, existen muchos estudios que avalan los beneficios que el curso regular de DHA puede producir en el organismo de adultos, bebés y personas de la tercera edad.
Tipos de omega-3 y que alimentos contienen
Existen tres clases de ácidos grasos omega-3, uno de ellos es el EPA o ácido eicosapentaenoico, el cual se caracteriza por los benéficos a la salud cardiaca, el otro es el DHA o ácido eicosapentaenoico y, por otro lado, está el ALA o ácido alfa-linolénico, el cual tiene como función el brindarle energía al organismo, además de que tiene la capacidad de transformarse en EPA o en HDA.
Tal y como lo afirma la Biblioteca de Medicina de Estados Unidos, todos estos ácidos grasos son fundamentales para mantener la salud del cuerpo y garantizar distintas funciones, dentro de las que se encuentran las funciones de las neuronas y del corazón.
Por otro lado, la revista Muy Saludable afirma que una gran fuente de ácidos grasos omega-3 son los aceites vegetales, a pesar de que el aceite de maíz, de soja y de germen de trigo son los que menos aportan, mientras que el aceite de lino es uno de los que más contiene.
De igual modo, señala a las semillas como otras de las grandes fuentes de ácidos grasos, destacando las semillas de chía y las semillas de lino, además de que se pueden obtener por medio de los frutos secos, el aguacate, los mariscos, las verduras de hojas verdes y los pescados azules.